"Aprender la levedad del pájaro."
jueves, 13 de octubre de 2011
.
Por unos ojos que no son mis ojos, ni los suyos, que no son los ojos que caminan la tierra o duermen el sueño. Que son los ojos que enamoran las calles, los cafés, las palabras. No son mis ojos ni los suyos, sino los de ambos, una mezcla de verde y marrón, de luna y sol, de nubes y estrellas. Son unos ojos incomprensibles para el que tan sólo mira, que no sirven para ver la rutina, sino para crear caminos nuevos hacia nuevos secretos y universos. Que son un mismo espejo, que se hallan donde el amor hace la palabra, cuando el sentido vive dentro del corazón.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario