"Aprender la levedad del pájaro."

martes, 28 de diciembre de 2010

Melodía en el autobus (-nocturnos)

En la oscuridad del anochecer temprano solo hubo una claridad, la de unas breves teclas de marfíl dibujadas tras su mano, aquella mano que para mi enmudecimiento (público involuntario), comenzó a moverse en el aire, a dibujar un piano en la nada, a crear notas del vacío, con la vista y el alma, puestas en el compás.

Duró un instante, pero fué suficiente para llamar mi atención, redescubrir sus rasgos, mi mirada puesta en aquella boca que silbaba una canción en silencio, en aquellos ojos fíjos en el sentimiento, ahora podía ver al fín su alma, que era como aquella mano, joven, hermosa, de pianista.

sábado, 25 de diciembre de 2010

Nothing is real

A la hora de la partida, siempre hablan las lágrimas en favor de nuestro enmudecimiento, el brillo de los ojos, un aviso antes de caer suicidas contra el abismo del rostro. A la hora de la partida, lo cotidiano es dejar escapar un suspiro de tristeza y coger tu maleta llena de nostalgias porque el tren se marcha y ves como ese rostro que te despide lacrimal es tan solo una sombra ya y ya no tiene mayor importancia que la que tu das a tus recuerdos, por lo que ya no tiene mayor importancia que la de sus besos, vuestros insomnios, vuestros largos paseos por el sur del sentimiento y el norte del alma.

Ya no hay nada, ni caricias, ni poesía. Tan solo queda ya un invierno del que habrá que salir endurecido, desmejorado pero endurecido, tan solo queda ya lamer las heridas, secar la sangre y evitar nuevas aperturas, coser bien la cicatriz, mimarla, cuidarla para que se mantenga cerrada y no desate un ataque de perdición solitaria en una hermosa primavera.

Solo-queda-el-consuelo

jueves, 23 de diciembre de 2010

Un pequeño consejo

Deja que su voz te mezca, de forma sencilla y contínua, segura e interesante, por los mares de tinta, por los puertos de papel, por el índice que es un faro, por la introducción que es esa playa, déjate llevar, déjate, que leer no es una obligacion, que leer debería ser un placer.

Nocturnos VI

Las intenciones de un casi

El pesimismo de un ojalá

Nocturnos V

Escúpeme una mirada, cortés.

Enséñame a mirarte.

No me dejes desquiciarte.

Y si te vas recuerdame.

Y si me voy, no te borres.

Nocturnos IV

El sombrero del mago está vacío de conejos, se niegan los pobres porque les habían reducido el número de cabezas de zanahoria debido a un reajuste.

El payaso se apaña con media naríz.

El funambulista ahora camina por alambre de espino.

Pero, ¿Qué es esto?, y quien sabe y que mas dá, pero lo que podría ser, oh lo que podría ser si ustedes quisiesen que fuera, pero ustedes no quieren, no creen que creer en la magia o la ilusión sirva de algo, pues miren, cuando tengan que contarles un cuento a sus chiquilines no vengan a joder, cuando quieran impresionar con un truco no vengan a joder, que ya bastante estan jodiendo con sus reajustes, deshaciendo sueños y construyendo hipocresía, ¡MADLITA MADUREZ, JODER!

Nocturnos I I I

Me salen cien pájaros del pecho por cada verso que te picotean la mente para que abres los ojos y repares de que hay algo más allá de todo lo que tú conoces, algo, simplemente algo, busca llenarlo y que adquiera forma, porque es un ente, que tú mismo has de modelar.

¿El mío?, los pájaros, con eso he comenzado, ¿no escuchas eh?, ¿explicación?, la poesía torpe, la poesía es un pajaro y cada palabra uno más, que salen disparados para expresar un poco y picotean si emocionan, si no emocionan no existen y entonces, para qué escribir
Ya esta, todos estamos posicionados ya, comienza el baile entonces ¿no?. Abro los ojos, camino torpemente, paso de forma breve pero profunda una mano que corre por la espalda de mi perro, camino por un pasillo helado, cocina, vaso de agua, camino por el mismo pasillo que no pierde nunca su frialdad, salon, quizas hoy no me golpee, "¡mierda!", por pensar no estuve atento, me golpee el pie contra la mesa, ventana. Aparto las cortinas y abro un poco los ojos, miro las farolas tenuemente iluminando los romances de mendigos y los sueños de los residentes, segundo piso, tercero, me paro, qué me importa, me lavo la cara, limpio todo rastro de orinicidad en mis ojos, pobres legañas, cuan leve es su vida, como una mosca, atada a mis ojos, debil, sin funcion aparente. La ducha cae ardiente y solo a ratos y a traición claro se muestra cruel en un segundo de agua fria. Café, salgo a la calle, frío, tendría que haberme abrigado más...

Todas las horas trasncurren iguales, el invierno, malditas fechas, todo es gris turbio o amarillo falso pero nada de la blanca navidad, todas las horas trasncurren pesadas como un pequeño hilo en la soga de la que cuelgo sin temblar mis pies porque aun estoy seguro pero que me encantaria cortar el apoyo. Todas las horas son mentiras, conversaciones inconcluyentes conmigo mismo porque el mundo no me interesa, quizás si me interese un acorde de mi hermano o un verso de alguien pero no las noticias, ni los diarios, nada, no ocurre nada, convenzanse, revoluciones de sofá, la proxima guerra, con mandos a distancia, ridículo.

Todas las horas iguales, todos los dias iguales, esperando un suceso, algo que me haga levantar la vista un poco y despertarme, porque mi corazón y mi alma siguen dormidos en la templedad segura de estas fechas y así seguiran hasta que un día nazca la primavera en unos ojos o en un desnudo, en un retrato o en una casualidad, o quien sabe, quizas ya no nazca más, "¡mierda!", de  tanto pensar, no paré en el charco.
Ella va sentada en el asiento del autobus de la segunda fila, el que lleva ventana claro.

Ay Milonga De Amor

Ella va leyendo, algo interesante de eso estoy seguro, ella se deja caer un poco el pelo en los hombros y luego se echa a un lado, es entonces cuando el sol le cae como una cortina y en segundo mágico...

Ay Milonga De Amor

...Se derrumban todas mis defensas cuando deja sus labios entreabiertos en una suplica o en un cansancio, entonces levanta un poco los ojos y ¿me mira?, de reojo quizás, de reojo tal vez, de reojo nunca, mirará entonces el paisaje.

Ay Milonga De Amor

Y la pena implícita en el primer contacto, la seguridad de que todo esto se acabará cuando finalice el trayecto, ella bajará haciendose la ciega, no mirará ni siquiera mi rastro, se irá por su camino y yo después de varios fracasos por el mío, pero...

Ay Milonga De Amor

...Y si no se marcha, y si se queda, me mira directamente a los ojos y me pide que la acompañe, quizás, ojalá, no estoi seguro, nunca, ella baja, su postura con prisa, disculpas, boton, la salida, espera, sus piernas tensas, sus ojos inseguros, su libro del que ya demuestra el título y se titula Rayuela, el moreno de su piel haciendole ascos al sol de verano.

Ay Milonga De Amor

Y yo bajo, aunque no sea mi parada, me coloco a su lado y no escondo intenciones, la miro sincera y poéticamente, como si estuviese delante de un cuadro, con dudas pero animado a averiguar. La miro y ella mira, un segundo claro, no quiere alertarme. Parada en seco, se baja, me bajo, nuestras sombras se cruzan y parecen bailar un tango que dura el tiempo que dura mi "¿Llevas fuego?", su mechero, mi cigarro, yo no fumo, que tontería yo tampoco, mi pie, las sombras siguen su baile, nuestras miradas siguen su conversacion, nuestros cuerpos aun no se atreven, pero caminamos sin prisa calle abajo...

Ay...

Menos amargo.

Como el agua cae lentamente y barre la suciedad de mi piel. Como me tomo mi café favorito, siempre sin esperar a que se  temple, ardiendo en mis labios y siempre en mi lugar favorito, Ítaca, tintado en un ambiente bohemio enriquecedor. Como mi hermano toca la guitarra siempre antes o despues de la siesta y no me resulta molesto, sino que inspira. Como mis manos dibujan en el aire una sonrisa y a veces unos ojos que miran, pero casi siempre se escabhuyen y dejan de mirar. Como mi perro salta de júbilo. Como mi madre se preocupa. Como el invierno sigue siendo esa manta que nos envuelve a todos con un frío turbio y los labios cuarteados. Como pasear. Como vivir. Como lo cotidiano puede ser tambien poesía, o quizá la poesía se esconda, en realidad, en lo cotidiano.

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Nocturnos I I

¿Oyes a tu corazón sonreir?
no, como lo vas a oir
si el alma no existe
si las penas aclaman al culpable
si tu quieres huir
sin que tus miedos rechisten.

Nocturnos

No solo no me dejaste embellecer tu vida
, sino que ensuciaste tú la mía con tu desdén.
Y yo que gasté mis días
en hacer
que este mundo fuese para tí un edén.

Bajo la nocturnidad inusual de este Diciembre, se calientan estas penas en aquella hoguera de nostalgias, bajo el insomnio y el sabor a hierba, se cuecen los mas hondos odios y envidias que el amor a veces y por error, frecuenta.

Preciosa

martes, 21 de diciembre de 2010

Shockorro

El amante guisante va ya por su tercer tequila, junto a tantos mártires de amor suspira fracasos en comodos balbuceos.

-¿Club de los poetas muertos?-
-¡no! ¡que va! solo abandonados..-

-Muertos entonces ¿no?-

tengounasoledadtanconcurridaporrostrosdevosquepuedoorganizarlacomounaprocesiónporcolores. . .

Holiday

Tres colores: TÚ


Esta en el cielo una asquerosa mezcla de grisoxídadomate que me pone los pelos de punta y la carne de gallina, que me obliga a poner vista al suelo buscando socorro. Pero está el suelo encharcado en barrosucioceniza que no dice nada a los impresionistas que tanto buscaron en su epicentro la esencia, pero aquí no la encontrarías ni a cien metros de profundidad, quizás si, claro si lo que buscas es nostalgia y tristeza pero desde luego el paisaje no puede ser mas deprimente, entonces me refugio en los arboles pero me miran con ojos de fracaso, sus hojas caidas, su falta de fuerza, su miedo al ayuntamiento los obliga a estar siempre en la misma posición y cada vez tienen más surcos y arrguas, ¿y entonces? un río verde con un azul escondido en su mejor pasado, un grupo de gente-robot que ni mira.

Pero y si encuentro mi escondite en unas pestañas, en unos ojos que no se cierren al primer vistazo, 1...2... no, cambio de dirección, pues nada, habrá que acostumbrarse a  este invierno.
Quizá sea hoy el día

Ando bajo la irreversible sombra de este invierno que congela sin piedad, tanto a ricos como a pobres a corazones y descorazonados a leyes y revoluciones. Ando pisando los charcos y los cigarrillos humeantes de un grito sordo, ultrasonoro, que quizá tan solo escuchen los estanqueros y las marcas de labios, ando y en un instante irreconocible tu te cruzas en frente mía, entonces te paras, observas y yo no sé cuanto dura este juego, me miras y te miro, te das la vuelta, te marchas, no sin antes espiar un poco más mi alma que tan traslúcida se muestra siempre en mis pupilas.

Entonces ejerces la huida, el gameover, fín del juego, no sin antes respirar el halo de aire que deja mi boca, no sin antes sonreírme cómplice del erotismo y la fugacidad. Pero lo que tú no sabes es lo que yo deseo, yo no deseo si quiera que me mires, no deseo que te pares e imagines, no deseo tu excitación fácil. Lo que yo deseo es que sin pretexto alguno por fín te pares y comiences a hablar, en poesía claro, recites algo, algo que me enmudezca el alma y me haga bailar con los dedos de los pies, tiritar con los dedos de las manos, lo que yo deseo es poder decírte al oído algún verso que te rompa en mil pedazos y caigamos al suelo envueltos en una mágico júbilo interversal.

Que los minutos transcurran como un capítulo de rayuela, llenos de descripciones hermosas, de momentos inolvidables pero que ni tú ni yo nos toquemos ni un milímetro, a no ser que tu te muevas un centímetro más a la izquierda o yo me gire un poco hacia la derecha y que en el suelo recostados nos encontremos de casualidad.

Pero claro, los deseos se hallan encerrados en lámparas escondidas en los trasfondos de los decorados de Disneyland París. Pero claro, a estas horas del día no cruzan las estrellas fugaces el nublado cielo y no tengo a quien recurrír ahora.

Por eso tu pasas a mi lado y respiras un poco mi aire, me miras un poco, te interesas un poco, me intrigas un poco, pero sigo mi camino solo, pisando los charcos y apagando los cigarros que siguen humeando agonizantes en el asfalto. Miro por ultima vez y en un segundo el pequeño palpitar de tus pasos, como se mueven tus prendas al compás y como me dejás mudo por un segundo, pero claro.

Y sangrando los dedos

Cuando escuchaste aquella armónica
y te echaste a llorar, dijíste:
"Grita"

lunes, 20 de diciembre de 2010

Solamente por embellecer lo cotidiano

Dejo que el suelo se hunda debajo mía y suspiro mientras me caen gusanos y la giratoria va dejando rastros de tierra en mi cara y mi ropa, mejor me desnudo, mayor comodida, sigue la descendencia del suelo y ya puedo ver las raíces, los restos, existen incluso calaveras olvidadas que sonríen de forma macabra, yo bajo. El interior de la tierra es increíble, aquí solo existe hueco para uno y de alguna forma aleatoria me han escogido a mí, tal vez por culpa de mí "Tierratrágame" quien sabe.

Pasan ya las horas y los minutos de oscuridad y la marcha se aminora cada vez más, ¿estaré esperando?, que más dá, si no sé adonde me llevan, se frena por completo, entonces un derrumbe me descubre los secretos de gea y enmudezco, mis ojos lloran a sangre viva, mis manos recorren las paredes y acarician la idea de aquel paisaje solitario pero hermoso, es el epicentro de todo nuestro mundo, de mi pequeño universo material y desmayo. Despierto podrido de tierra y gusanos al lado de un banco lleno de mendigos que se disputan mi cartera, la recojo, me disculpo por mi apariencia, las moscas me toman por lider y me siguen embriagadas por mi olor a mierda y carne podrida.

Cuando llego a casa me siento en el suelo, pongo mi oreja cerca, al principio frio, luego se templa, sonrío escuchando los lamentos y charlas que quiere tener la tierra conmigo, ella me bajó, me bajó hasta el centro de su corazón, rompiendo su coraza de etapas geológicas y montañas. Ahora soy su aliado, ahora la entiendo. Me ducho el cuerpo, el corazón y el alma están ya limpios y lo estarán así para siempre, gracias a la pureza de aquel entierro, de aquel tierratrágame que se materializó increíblemente bajo mi sombra que dejó de ser sombra para ser rastro cuando dije adiós por un tiempo a la luna y el sol.

Ahora sí que puedo con su lenguaje indio, sus fogatas sin humo, sus gritos de socorro, AHORA SÍ. Por alguna extraña razón nadie me cree, dicen que apesto a ginebra y desvaríos pero yo digo que ellos apestan a realidad y vulgaridades, cretinos, se marchan en grupo para encontrarse en grupo y socializar en el sentido más sexual de la palabra. Yo quisiera ahora, cuando me bebo el segundo trago de un gin tonic mal hecho que la tierra me tragase, como aquel sueño que tuve y ahora, ¿qué ocurre?, nadie lo percibe y yo dejo que el suelo se hunda debajo mía y suspiro mientras.....

Me arde

Días que se escapan
brillan sobre el suelo mojado
los charcos grises
como un mar en el suelo
como un oceano olvidado
Se acerca el final lo presiento, todos las miradas están puestas en mi, las convulsiones siempre provocaron esa sensación de morboso pánico que atrajo al público en círculos alrededor del protagonista involuntario esta vez interpretado por mí. Mis ojos en blanco producen el asombro, creen que delata delirio pero en realidad puedo ver, miro más allá de sus eléctricos movimientos que intentan recomponer mi cuerpo, miro más allá del estupor, de las cicatrices, de los llantos y las llamas que se alimentan el uno al otro. Puedo ver sí, es más, puedo hablar, pero nadie de aquí lo sabe. Estoi charlando tranquilamente con cada una de sus almas, la de los presentes no tienen nada que decir, están alimentandose de mi desgracia, fingiendo sentir pena con unas lágrimas de actríz de tercera, las de los médicos son mas nobles, están intentando consolar a la mía que se ha echado a llorar tras ver mi segundo ataque en el mismo mes, pobre, yo no le deseaba un cuerpo tan débil, tan rendido a las emociones pero así fué y ahora, como voi a mantenerla si ni yo se sostenerme, cómo voy a alimentar su curiosidad si mi amor a Cortázar no me permite abrir otras tapas y llevo encerrado en la misma Rayuela semanas desmedidas, como voy a alimentar su creatividad si el hotel solitarios está haciendo honor a su nombre y no teclean mis manos historias y no crea mi mente sus vidas y no, el living está vacío de huespedes y palabras y no, las poesías están prendiendose en la hoguera que dejé encendida desde tu marcha y que ahora está desvaneciendose no sin dejar antes un horrible rastro de humo y ceninza.

Es el segundo tropiezo, el tercer intento de asalto, la recuperación, la campana, el público ardiendo en gritos de júbilo, mi regreso, mi caida, mi nada, mi ausencia, mi mediocridad, ciudadano ?.

Está borrándose en el tiempo, está perdiendose en una tormenta de miradas vacías y vasos sin hielo, está borrándose en el tiempo, bajo la marcha funebre de algún autor desconocido que no suena en las radios pero sí en los corazones sin que nadie lo sepa, las palabras, las palabras son su feretro y si nadie visitará su capilla ardiente ¿para qué tanto embalsamamiento?

domingo, 19 de diciembre de 2010

La soledad del hogar sin la ropa tendida.
La crueldad de la humedad.

Lalala

Backliners

Ponme un cóctel de lágrimas sin hielo por favor, no te olvides de la nostalgia y el frío y aquel amargo limón que me encanta morder

Paraísoinfierno

Vivir en torno a un sueño que en cualquier momento puede desvanecerse entre tus manos y ser aire o arena en un nivel de mayor o menor crueldad. Vivir por una sonrisa que no es de verdad, que tan solo mueve los hilos de una confusión, de una espiral de inmorales preocupaciones de importancia vanal pero importante aunque ridicula sea esta contradicción. Vivir en torno a un cuerpo que no entienda de horarios ni del tiempo, vivir en torno a un corazón que no entienda de infidelidades o mentiras, vivir en torno a un alma de poeta que no entienda el fracaso.

vivir en torno, vivir de cuando en cuando, otras veces no vivir, tan solo tener los ojos abiertos y el alma cerrada, como cobardía, al resguardo de todo, como un corazón con paraguas para la tristeza. como yo

Desconocida.

Quiero que estalle mi pecho en un latido que retumbe en las calles y el frío. Quiero enamorarme hasta del más mínimo detalle de tu sombra, que al cerrar los ojos mis manos se muevan solas y dibujen tu figura en el aire para recordarte cuando no estés. Y cuando estés, quiero que nos conozcamos con las manos y el alma, quiero que seamos cien emociones que exploten como cien bombas de pasión y desengaños. Quiero agarrarme a tu cuello y no quemarme, quiero que me mires con esos ojos que aun no son nada. Quiero que tu mires los mios y perdernos en buscar la verdadera razón de nuestro iris, que nuestros guiños en clave de morse se digan palabras cuando no nos quede más voz. Quiero que tu seas el hecho más importante del día, recordar a cada instante aquella hora, aquel segundo en el que tu de forma aleatoria y precisa, te cruzaste en el momento justo en el que mis ojos buscaban distracción y se tropezaron contigo y te miraron, el mundo entonces fué un borrón, una mancha que fuera de ti nada tuviese importancia y tu, por complicidad o pena me mirases con esos ojos con los que siempre miras las cosas que al principio no te interesan pero que guardas en tu interior un ferviente deseo de conocer.


Quiero, perfecta desconocida, que nuestra historia no la escriban escritores ni guionistas, sino nosotros mismos, con besos de tinta y piel de papel. Quiero, perfecta desconocida, que salgas a la calle a la misma vez que yo a ver si de una buena vez nos cruzamos y podemos enamorarnos sin freno ni marcha atrás, porque estoi cansado de la resaca y el delirio alcohólico, el baile ridículo y la soledad del aseo de un bar de carretera, porque estoi ansioso de conocerte en cualquier parte, a cualquier hora y cualquier dia, no tengo preferencias, al menos no con esto, no quiero presionarte, tan solo conocerte y brindar por vos, sin que vos sepas que brindo por tí.

Rayuela

Como si supieras ver todas mis goteras internas, como caen las emociones encima de la sangre en el epicentro de mi corazón, como si marcases tu el ritmo de mi palpitar.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

Peter plan.

-Bla, bla, bla, bla, bla....-

-Mmm, bla, bla, bla...-

Y yo que estaba sentado al lado de aquellos dos modelos de hombre fino y correcto, esperando como cualquier mendigo al autobus, como siempre con retraso, me tomé la libertad de alzar mi voz, levantarme un poco, fijar mi vista en sus arrugas ocultas en cuellos subidos de camisa y marca, de decir:

- Ustedes dos hablan mucho y por norma muy bien pero, ¿de verás dicen algo? ¿se entienden?.-

Entonces ellos, como agredidos e insultados me miraron fijamente y comenzaron a soltar tal sarta de blablablás que decidí irme andando a casa.

Ojalá pudiera escribir como un niño, es decir, dejénme que amplie, los niños por norma cuando hacen algo artístico lo hacen con una inocencia y una sinceridad que son la envidia de mi yo lector, mi yo escritor, mi yo dibujante y mi yo actor. Cuando somos niños no valoramos nuestra forma de expresar sin embargo con la madurez y el tiempo comenzamos a valorar más la forma de expresión de nuestra alma y a veces forzamos la escritura, cuando realmente no hay que presionarla sino recuperar esa sinceridad, esa simpleza que hace que todo quede claro y nuestra alma sea cristalina como el agua.

OJALÁ PUDIERA VOLVER AL "hola, me llamo Álvaro y tengo cinco años" AUNQUE ESTO ESTUVIESE PLAGADO DE IRREGULARIDADES Y LETRA TURBIA.

Siempre en estado de espera

Déjame pasear por esta hierba azul, tan llena de mar, dejame soñar por este camino estrellado, tan delicado que cualquier legaña lo puede quebrar, dejame practicar el analisis, que la catarsis ya no me sirve, me pongo en un espejo a hablar, sobre todo, sobre nada, sencillamente a conversar, me veo a mi mismo y no me veo porque no me miro, tan solo estoi jugando a que estoi bien, a que esta máscara es de mi talla, tan solo y solo a ratos, deliro y es cuando mas cuerdo me siento, porque se desatan los engranajes que me atan a la falsedad de mi felicidad fingida.

Tómalo o déjalo, no te quedes en medio-de-un-horrible estado de STANDBY

De insomnios y soledades

¿Qué sintió Amelie cuando por fín sus labios rozaron aquellos que tanto andaban buscando y por los que luchó durante todos sus desvelos para encontrar?

Me veo a mi mísmo en sus ojos, hasta parezco más guapo, hasta sonrío, en sus ojos veo el brillo de mis ojos y ya no hay duda. ESTOY ENAMORADO . Y ahora es cuando me acerco un poco y la miro, ella finge que no sabe, pero de sobra sabe que la miro, la luna chapotea luz en los cristales pero a ninguno de los dos le importa, mi vista hacia ella y su vista hacia nada, me acerco un poco MÁS. Ahora ella finge que es la primera vez que me percibe, se gira, sonríe, sonríe y se acerca un poco mientras yo muero de forma acelerada, mi corazón realiza varias acrobacias mientras mis manos recorren el camino hacia su figura, la toco,  siento su piel más allá de las costuras, acaricio su mano, su mano que me acaricia en forma de respuesta, ahora paso cada uno de mis dedos por su brazo y a cada segundo corrientes eléctricas me llenan de calma, ahora ella es la que mira, me mira y me veo a mi mísmo en sus ojos, hasta parezco más guapo, hasta sonrío, en sus ojos veo el brillo de mis ojos no hay duda: Es el momento. Todo este diálogo dura un segundo, me acerco y rozo sus labios, lento, dejo que nuestras lenguas jueguen con una complicidad como si se conociesen desde siempre y gozo, no del placer más que masticado de besarse sino de la plenitud de esta oscuridad, de nuestras manos aun sujetas a nuestros dedos que aun siguen recibiendo calambres, de nuestros cuerpos que ya rompen las barreras de la verguenza y se buscan. Entonces nos separamos un poco,ella sonríe y yo lloro. ¿PORQUÉ LLORO? . ¿Qué dia es hoy?, mierda, sigue sin ser veinticuatro de Febrero, es más ya queda poco para que muera el año en que me enamoré de ti, era solo un recuerdo, un sueño macabro, una estupidez, de nuevo, un hastío.

Y que nuestro primer encuentro fuera casi idéntico al último

¿Por qué te esondes de mí, en madrid?

Veneno negro yo tengo en la sangre.

Todos los castillos de arena que no supieron ver las señas del tsunami, ahora están derrumbados.

Todas las estrellas que en el cielo pedí que sostivieran mi sueño de sostenerte conmigo, están fundidas.

Todos los besos que sabían a éxito ahora saben a resaca, a lágrima.

Todas mis poesías a la altura de las alcantarillas, quizá a las ratas les interese roer esos papeles pintados de algo que ahora vale menos que las palabras que por cortesía me dijiste como despedida.

Todos mis sentidos estan rendidos a tu ausencia y camino, pero no dejo huella y hablo, pero no deja hueco mi voz y miro, pero mis ojos no ven más allá de tu recuedo sonriendo, que late en mi corazón a un ritmo lento, que me pacifíca y a la vez vuelve mis costillas contra mí en una presión de inaguantable caracter de martir.

Y aun espero que me vuelvas a llamar, como siempre, para pedirme que vuelva y poder decirte..

Y si cada bocado me lleva a su boca.

martes, 14 de diciembre de 2010

Autorretrato Invernal

Cuando el grito dejó paso al eco, cuando dejaste la marca de tus lips en todos mis azulejos, cuando las heridas no sabían que la mercromina actuaba tan lentamente, cuando los recuerdos formaban filas junto a las lágrimas en un intento de golpe de estado-animico-mental.

Me encuentro en ese instante de tiempo en el que el tiempo te importa menos que los diarios y el sol es solo la estufa que calienta tus ojos cada mañana y la luna el lucero que acompaña las gondolas, hace bailar a los mendigos o a los lobos y a ti te acuna con su indiferencia. Me encuentro apático y aun así consigo que las palabras tengan cierta profundidad, profundidad sin fondo por la que mi alma cae en una espiral de preguntas sin respuestas o respuestas para preguntas no formuladas.

Soy un sin sentido. Un Norton sin Pitt. Me-falta-algo-que-tú-tienes

Y es que yo, yo ya no tengo corazón (se escapó)

En el boulevar

Mi

"Buenos días princesa"

Se quedó estancado en tu:

"Buenas noches y hasta luego"

Te salvaste, como diría Mario, nos juzgaste sin tiempo, déjame intentarlo pero tu ya no quieres valientes que salten hasta tu ventana, ni Paula en mis ojos, ni Álvaro en los tuyos. Ya terminó la primavera, el verano de sonrisas ahora el invierno viene con su soledad escondida en copos de nieve, charcos y luces como velas.

Belle epoque

Se desvistió lenta y cuidadosamente dado que su cuerpo ya estaba en peligro de derribo, se sentó en la silla, miró sus arrugas y concluyó: un suspiro. Notó como dos lágrimas, dos pequeñas gotas despintaban su rostro de actriz y la devolvían a la realidad de la vejez. Se deshizo el moño, sonrió de forma hipócrita, se limpió los ojos y la cara con un pañuelo y pensó "el espectáculo debe continuar". Se levantó tranquilamente, sorbió el ultimo trago de mate y dejó atrás aquel tocador, aquella habitación que lejos quedaba de los lujosos camerinos del champagne y las flores. Salió a la calle vestida de fantasma y nunca volvió. Su alma se quedó en los escenarios, su corazón en aquella carta a su marido antes de morir y su cuerpo debidamente embalsamado, viejo reflejo de sus años de gloria, actriz consumada y clásica, ahora dormía plácida, soñando con aplausos ultra-sonoros, a tres metros bajo el suelo.

La avaricia mató al gato.

Juan Hidalgo estaba en una encrucijada
entre dos amores
entre la pared y la espada
¿con cual de las dos mercedes
se debía quedar?
¿con la que costó su billetra
o la que costó conquistar?
"oh que cuatro ruedas,
oh que busto firme,
¡ay que pena!
¿con cual de las dos debo irme?"
al final para decidirse, truco facil, moneda al aire
pero la Mercedes, de carne, se enteró
y metida en la de ruedas, se marchó
ay pobre Juan, sin transporte ni amada
ay que por avaricia
te quedaste sin nada.

lunes, 13 de diciembre de 2010

ítaca

Encierrame en un ataud lleno de sueños y prometo convertirlo en un barco donde tambien quepan ilusiones, arte y tú, si quieres navegar conmigo. Los mares serán  deseos en color púrpura, un sol verde nos dará energía y vientos de optimismo nos alejaran de  la frustración y el fracaso. Busca las coordenadas  cuando estes dormida y guarda tus pensamientos para el blanco bitacora que lejos queda ítaca, pero  te prometo que vamos a encontrarla.

Infarto del alma.

Hoy me dió un infarto anímico en plena gran vía, ¿crees que alguien vino a prestarme ayuda?, nadie. Entiendo que sea difícil de ver una alma pero si se hubiesen esforzado un poco habrían visto la mía retorcida de dolor en el suelo. Claro, que si les estoi contando esto es porque finalmente logré recuperarme, pero lo que me apena es que nadie sepa ver almas, aun cuando están muriéndose en sus propias narices.

Lo que me apena es que sigan cayendo manzanas de los arboles que ahora se muerdan, porque ya nadie piensa en la gravedad.

Luces de navidad

Las luces de navidad me dañan los ojos, son tan hipócritas como el maltratador que más tarde regala joyas o el mal padre que expía sus pecados con tolerancia y visitas al zoo. Qué bonitas quedan al anochecer alumbrando las palabras de dos amantes, pero su forzada belleza artificial nos roba el hermoso, nocturno y plácido brillo natural de las estrellas. Yo las odio, son tan solo una muestra más de que el espíritu navideño reside en la amnesia antes que en la solidaridad como debería.

Luces, velas de entierros cotidianos o faroles de mendigos, apagaos, dejadnos ver por fin, la-luna-blanca.

Te llevaste mi luna en tu trazo

Cuando dibujaba estrellas en tu espalda, no caí en ponerles paracaídas, ahora están todas rotas, tiradas por los suelos, quebradas y no tengo tanto tiempo como para recomponerlas todas o quizá sí, pero lento.

Como luces fundidas y bombillas explotadas, me he quedado a oscuras, sin luna ni estrellas, sin abril prematuro, atrapado en un invierno que no-me-gusta, lleno de luces de Navidad que se ríen de todas las campañas de ahorro energético del gobierno.

Y harto de tu huelga de emociones que no deja volar los aviones de mis sentimientos por encima de tu cabeza y harto de desengaños y dolores.

Siempre me quedará la poesía y una Murcia rutinaria y repetitiva para pasear y olvidarme un poco, siempre me quedará el Florencia amargo, siempre, mis pequeños recursos, mis métodos para salir de esta, huir de lo que llaman desamor, porque el amor esta tan rumiado en best sellers y carteleras que la mayoría de los transeuntes que pasean por la calle creen saber llevarlo y a-la-mínima, se asustan, creen ser actrices que huelen las flores entregadas por don juanes, pero no, para el riesgo piden a un doble que aguante las heridas, pero mi doble, creo que sigue en huelga desde la ultima vez que consiguió que todo siguiese bien.

domingo, 12 de diciembre de 2010

De haberlo sabido

"de modo que si ocurre un desconsuelo
un apagón o una noche sin luna
es conveniente y hasta imprescindible
tener a mano una mujer desnuda."

Desnuda no, está vestida, delante mía y algo disminuida, con esquinas y una sonrisa vertical, recostada sobre la cama de una hermosa y ardiente granada, mirando al frente, jovial, abrazada a la almohada y con las sabanas cubriendole el cuerpo de forma espontanea y adecuada. Ojalá fuese pintor, ojalá pudiese resumir la sensillez de esa fotografía en un gran cuadro de renombre pero no puedo. Ojalá fuese escritor, ojalá pudiese definir con palabras tanto amor, tanto cariño, tanta ilusión concentrados los conceptos en ese abrazo, en ese cuerpo, en esa tez blanca y rubios cabellos, en esa sonrisa de marfil y ojos de lluvia, en ella. Ojalá pudiese perder la memoria, como Carrey borrar adrede recuerdos dañínos, porque si por algún motivo mi cabeza falla, se equivoca y pierde involuntaria y acertadamente esos recuerdos de amor y los sustituye por los del dolor, la soledad, el frío, la rabia, la frustración,el odio, por si acaso eso ocurre siempre me quedará esta foto que miro ahora con nostalgia y siento como se derrumba en mi interior un muro antes construido con constancia y compañía y siento como se apaga el fuego del corazón por lágrimas que llenan de insomnios y humedad noches como esta, en las que dormir es casi un triunfo, en las que permanezco despierto para recordar u olvidar, me confundo, ya ni sé cual es la función de este texto que comenzó con una foto, que surgío con mi ex novia revolcada y felíz en una cama, que plasmé sencillamente en una foto, cuando eran tiempos mejores, cuando éramos reyes y la suerte me hacía un guiño.

Pero-ahora-la-suerte-me-mira-con-ojos-de-tuerto-y-se-me-aparece-en-forma-de-espejos-rotos-y-gatos-negros.

Un florencia por favor.

Seguro que Audrey tambien se fijaría en estos detalles, como los incondicionales en la barra, relamiendo espuma de cerveza mezclada con tínta de periódico,las botellas de turbias formas y múltiples colores por culpa de los cristales tintados o lo hermosa que se ve la lluvia tras esas media-cortinas que no son capaces de esconder una tormenta con tan grande cristal o la habitación de arriba o el escondite de abajo y qué misterios guardarán, cuantos almanaques, tés, cafés o discursiones habrán trascurrido entre esas cuatro paredes de madera clandestina. Los cuadros imprevistos, minúsculamente avisados en la puerta, el menú del día, poesía sin nata por favor, al menos para mí, conversaciones sin frío, miradas complices, relatos cortos, revoluciones nacidas del descanso y la paz.

Seguro que a Horacio le hubiese gustado este pequeño rincón literario que subsiste eterno dentro de la poca iniciativa artística, seguro que hubiese discutido aquí su metafísica, pero yo le dejo estar, le traigo atrapado en 569 páginas.

Y mis ojos que recorren esta estructura, este corazón tranquilo de suelo frío y paredes cálidas, estantes que esconden libros que a veces coges, por curiosidad y te encuentras con una gran novela, mientras el café se prepara, veo como escogen la taza, la cuchara, el azucar y entonces tengo para mí disfrute un dulce florencia por el cual cierro los ojos y apago la rabia, por el cual cada tarde que me lo permite mi pereza ando los diez minutos que separan ese templo literario de mi casa.

Y lo importante no es el café, si no los minutos en los que mis ojos recorren todos los detalles de ese maravilloso lugar y sueño.

Escenario sin actor

Recuerdo cuando era niño y mi padre me llevaba a ver sus obras de teatro, a mí me encantaba entrar en el camerino y ver como se transformaba, jugar con las espadas, pintarme la cara, vestirme de Dartacan o de pirata. Luego me sentaba en la primera fila y reía o lloraba, gritaba o enmudecía ante la presencia de los actores sobre el escenario y ese brillo de mis ojos, era el de ver  a mi padre convertido en alguien totalmente distinto.

Luego, cuando ya se habían apagado los aplausos y no quedaba nadie, cuando los actores se desmaquillaban y bebían vino de celebración o de fracaso, recuerdo que me gustaba subir al escenario, a oscuras, sin ningún foco ni brillo, me paseaba por ese mítico lugar de hazañas y diálogos aun en mi memoria y siempre o casi siempre me sentaba en el borde y me recostaba, miraba al techo y sentía, el escenario sin actor, la inmensidad, el arte y pensaba en mi inocencia "yo quiero algo así" aunque no hubiesen aplausos ni flores, exitos ni dinero, a mi me gustaba la sensación del escenario en calma, dejar correr mi imaginación, permitirla jugar un rato como ahora, con las palabras.