"Aprender la levedad del pájaro."

jueves, 23 de diciembre de 2010

Menos amargo.

Como el agua cae lentamente y barre la suciedad de mi piel. Como me tomo mi café favorito, siempre sin esperar a que se  temple, ardiendo en mis labios y siempre en mi lugar favorito, Ítaca, tintado en un ambiente bohemio enriquecedor. Como mi hermano toca la guitarra siempre antes o despues de la siesta y no me resulta molesto, sino que inspira. Como mis manos dibujan en el aire una sonrisa y a veces unos ojos que miran, pero casi siempre se escabhuyen y dejan de mirar. Como mi perro salta de júbilo. Como mi madre se preocupa. Como el invierno sigue siendo esa manta que nos envuelve a todos con un frío turbio y los labios cuarteados. Como pasear. Como vivir. Como lo cotidiano puede ser tambien poesía, o quizá la poesía se esconda, en realidad, en lo cotidiano.

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